El Turismo Rural como herramienta de promoción

El Turismo Rural como herramienta de promoción
Más de un centenar de productoras rurales de diversas zonas del pais exponen sus productos en catálogos que se distribuyen en establecimientos hoteleros de turismo rural de doce comarcas del interior gracias al proyecto "Despensa Femenina del Mundo Rural".
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El proyecto está desarrollado por la Confederación de Mujeres del Mundo Rural (Ceres), colabora la Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas (COAG). Según la organización agraria, se trata de una "alianza estratégica entre productoras y alojamientos de turismo rural para estimular el crecimiento económico de doce comarcas españolas".

Los alimentos locales producidos por mujeres se promocionan de esta manera en restaurantes, tiendas y casas de turismo rural para aportar un valor añadido a la oferta para los potenciales visitantes y abrir nuevas vías de ingresos a las explotaciones familiares. Entre los objetivos de esta iniciativa también está generar empleo e ingresos para las mujeres, diversificar la economía fomentando la venta de productos elaborados, potenciar que los establecimientos turísticos de alojamiento y hostelería se abastezcan de productos autóctonos y hacer visible el carácter creativo e innovador de la mujer rural

La responsable del Área de Igualdad de COAG, Belén Romero, ha explicado que para este programa, financiado por el Gobierno y con fondos europeos, se han seleccionado doce comarcas o zonas "especialmente llamativas e interesantes por su espacio natural":
- El Valle del Jerte, en Extremadura
- Cabo de Gata, en Andalucía
- Belchite, en Aragón
- La Isla de Gran Canaria, en Canarias
- El Valle del Pas, en Cantabria
- El Parque Natural de Arribes del Duero, en Castilla y León
- El Pirineo Catalán
- La comarca de Compostela en Galicia
- La Sierra Tramustana en Baleares
- El noreste murciano
- La comarca valenciana de L'Alcoia
- La zona de Encartaciones en el País Vasco

En los catálogos, los visitantes pueden encontrar información sobre materias primas o productos transformados artesanos, como quesos, vinos, mieles, dulces o jabones, y datos complementarios sobre las productoras y su labor para garantizar la sostenibilidad de los territorios.